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María, la madre de
Jesús
María
es un personaje que a mí particularmente me impacta, me gustan las semblanzas
que traen los evangelios de María…
De esas
pocas menciones ¿qué es lo que a mí particularmente me toca?
1.-
Me encanta el pertenecer en la fe de María. Eso es fundamental, uno de los
verbos más complicados es permanecer, de hecho es el verbo de los discípulos en
el evangelio de Juan, el permanecer es el verbo de los discípulos, es la acción
de los discípulos. Todos estamos llamaos a permanecer pero todos estamos
tentados a desertar, constantemente estamos tentados a desertar, estamos
tentados a irnos a evadir…
Hay
que hacer un esfuerzo, importante, valioso de permanecer en la fe…
María
está al inicio y al final (en el cuarto evangelio) eso es una inclusión y eso
lo que muestra es que ella estuvo permanente, ella permaneció en el ministerio
de su Hijo. Está al final, para decirnos que a lo largo del ministerio de su
Hijo, ella estuvo presente.
2.-
Pero me encanta que permanece y no abandona a su Hijo, está en la cruz con su
Hijo. Muchos cuando vienen los problemas abandonan. Muchos cuando vienen las
dificultades abandonan, muchos cuando vienen las situaciones difíciles,
abandonan; dicen: “ya no más”, dicen: “hasta aquí llego”. Ella no, ella se
mantiene y para eso se necesita la segunda actitud. Si la primera actitud está
expresada por el verbo permanecer, la segunda es valentía. Porque hay que ser
valiente para permanecer, hay que desafiar las dificultades hay que enfrentarse
a los enemigos para permanecer.
No
es fácil permanecer, normalmente cuando uno quiere permanecer se ve sin duda
atacado, se ve sin duda tentado y siempre les he dicho que el mal, que por
cierto el Papa Francisco insistió en su última exhortación apostólica, en que
el mal es un ser personal, no una idea, no una idea, ni un mito… el mal nos
tienta de dos maneras, o busca seducirnos, se viste bonito…para tratar de
tentarnos o nos levanta a trompadas y entonces vienen los líos, vienen los
problemas, vienen las dificultades.
Entonces,
yo creo que en eso hay que tener mucho cuidado, en eso hay que saber permanecer;
a pesar de las tentaciones, a pesar de los golpes de la vida, a pesar de los
ataques del mal hay que permanecer y hay que permanecer con valentía,
enfrentando las dificultades… No tenerle miedo al desafío. ¡Qué importante eso!
No tenerle miedo a los desafíos, no tenerle miedo a lo novedoso, no tenerle
miedo a lo que no conozco…
3.-
María se tomó en serio la palabra de Dios,…María se tomó en serio lo que Dios
le propone, lo que Dios le dice… Si queremos ser discípulos tenemos que
tomarnos en serio lo que Dios nos está invitando. Muchas veces nuestro problema
es que no nos tomamos en serio lo que Dios nos está invitando, muchas veces
nuestro problema es ese… Dios está actuando en nuestra vida, Dios está actuando
en nuestro corazón y Dios nos está mostrando y haciéndonos sentir la necesidad
de amar, la necesidad de luchar, la necesidad de lanzarnos; a veces en fe, hay
que tomarse en serio la Palabra. Ser creyente es eso, es tomarse en serio la
Palabra. María se la tomó tan en serio, pero tan en serio, que asumió un riesgo
inmenso, un riesgo inmenso, inmenso, un riesgo terrible.
4.
María acompaña a los discípulos. No sólo permaneció con su hijo sino que después
permanece con la comunidad. Su fidelidad a la persona de Jesús no es solamente
fidelidad a Jesús, sino a la comunidad también… No se puede ser fiel a Jesús
odiando a la comunidad”…
(Ver primer video para completar el breve
resumen en esta transcripción.
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“¿Cuáles son las actitudes de un verdadero creyente?
1.- Un verdadero creyente conoce su realidad. Sabe quién
es, sabe dónde está, sabe cuáles son sus errores, cuáles son sus debilidades y
también cuáles son sus fortalezas.
2.- Un verdadero creyente está abierto a la trascendencia,
está abierto al encuentro con Dios, está abierto a la novedad que Dios nos da,
3.- Es una persona que se esfuerza por crecer. Todos los
días lucha por ser mejor ser humano. Acepta esa Palabra que Dios le dice a
Josué: “Esfuérzate, ten ánimo, se valiente”.
4.- Vive en una evaluación continua, sabe hacer examen de
conciencia. Sabe que hay momentos en los que tiene que revisar ¿Cómo está viviendo?
¿Cómo está actuando? Evaluarse es fundamental.
Insisto en estas actitudes de creyentes:
1.- Constatación de la realidad.
2.- Apertura a la trascendencia.
3.- Esfuerzo por crecer.
4.- Evaluación continua.
¡Oye! Dios está contigo, Dios te llena de alegría y Dios te
llena de paz. ¡Ánimo en Él!!Tu sabes!” (Ver segundo vídeo)
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Tareas:
- Ser
valientes.
- Vive con
coherencia tu opción de vida.
Pbro.
Alberto Linero Gómez. (Abril 23 - 2018)
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Enlace
para l vídeo del programa diario por TV.:
Y para ver el vídeo con su breve
reflexión les comparto también el enlace…
♫Feliz☀día♫✿ El Señor nos ama y bendice.
Él es Luz, camino, verdad, Pan de vida; es el gran pastor de ovejas que es
capaz de dar la vida por cada una de ellas. Nos conoce a cada uno de los que le
seguimos, nos llama por nuestro nombre, cuida, se desvive por nosotros y nos
conduce a la paz, a la plenitud eterna, a la vida en abundancia.☺
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