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Una
bendición especial para ti.
Iniciamos
un nuevo día, un nuevo mes y lo hacemos con alegría, y lo hacemos con ánimo, y
lo hacemos confiados en el Señor. ¡Vamos a iniciar este día con todas las ganas
y todas las fuerzas! Dile al Dios de la vida que tú confías en Él, dile al Dios
de la vida que tú crees en Él, dile al Dios de la vida que tú estás dispuesto a
dar lo mejor de ti para hacer de este día un día memorable, que nos podamos
acordar de él.
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Padre Dios te alabamos
y te bendecimos en esta mañana, te entregamos esta nueva jornada, te entregamos
este nuevo mes, te pedimos nos asistas con tu inteligencia, con tu fortaleza y
que nos ayudes a ser felices. Confiamos y creemos en Ti. Alabado y glorificado
seas, hoy y siempre. (Amén, amén y amén.) ✿
Tomemos el
tema de hoy.
Uno de los
verbos fundamentales en las relaciones interpersonales es “escuchar.” Es un verbo mágico. Ojalá nosotros supiéramos y entendiéramos
el poder que tiene la escucha, el poder de saber escuchar. Cuando tu sabes
escuchar, no solo puedes tener una mejor conciencia de lo que está pasando a tu
alrededor, sino que además puedes conocer mejor a las personas y puedes establecer
con ellas relaciones exitosas, relaciones saludables, relaciones constructivas.
Escuchar
es fundamental. Yo lamento que a nosotros nos guste hablar mucho y nos cueste
escuchar. Yo lamento que nosotros seamos hombres y mujeres que constantemente
estamos hablando y no, que seamos capaces de hacer silencio y de escuchar.
Hoy te invito
a escuchar, hoy te invito a saber pausar la vida, ponerle pausa a la vida y
saber ¿qué está pasando en tu entorno y qué está pasando en tu vida?
Escuchar a quién es la pregunta:
1° Y la
primera respuesta es escucharse a uno
mismo. Yo creo que uno
tiene saberse escucharse, yo creo que uno tiene que saber hacer silencio y escuchar
lo que dice cada latido del corazón, y escuchar lo qué es lo que mi voz
interior, mi pensamiento me está diciendo, porque muchas veces por no sabernos
escuchar, no nos damos cuenta que el lenguaje interior, no nos damos cuenta que
nos estamos diciendo cosas muy destructivas a nosotros mismos. Y eso es grave,
y eso es terriblemente grave. Ojalá tú puedas serenarte, tranquilizarte y saber
escuchar. Si, pensar en ti mismo y oírte, y darte cuenta de cuáles son las
cualidades de tu pensamiento. ¿Es un pensamiento que te dice y te invita a ser
mejor? O ¿Tú te estás cada día autoinsultándote? Tienes que escucharte más, aún
cuando hablas, escúchate, porque muchas veces dices lo que no quieres decir.
Muchas veces tu tono, tu manera, tu forma, degeneran todo lo que tú querías
decir, destruyen lo que tú querías decir.
Qué
importante que sepas escucharte. Escuchar tu pensamiento y escucharte al hablar.
Eso es fundamental en la vida.
2° Escuchar
a los otros, escuchar a los que están a mi alrededor,
escuchar a los que forman parte de mi vida, escuchar a aquellos con los que
tengo relaciones constante, escuchar a aquellos con los que hablo, escuchar a
aquellos con los que trabajo, escuchar a aquellos con los que hago mi familia o
son parte de mi familia. Escuchar al otro es fundamental, allí siempre hemos
insistido en las tres A de la escucha, en la atención, en la apertura y en la
acogida.
1.- Hemos
insistido en que es fundamental para poder escuchar, estar atento a lo que el
otro nos dice, estar atento a lo que el otro va compartiendo y va explicando;
es fundamental la atención.
2.- La apertura.
¡Ah! ¿Si creo que lo que tú dices es equivocado para qué te escucho? ¿Si creo
que tú no tienes nada bueno que decir, para qué te escucho? ¿Si creo que lo que
tú vas a manifestar no es lo que me puede ayudar a crecer, para qué te escucho?
3.-
Importante, valioso, para que lo tengas presente. Necesitamos, oye tú, acogida;
no del mensaje de la otra persona; que la otra persona se sienta amada, se
sienta valorada, se sienta respetada por ti. Eso es fundamental.
Entonces
hay que escucha a los demás. Haz ejercicios de escucha, no hables por momento y
escúchalos, escúchalos. No se puede vivir sin escuchar y el que vive sin escuchar,
termina armando conflictos innecesarios, termina armando situaciones muy
complejas, termina armando peleas que se podrían haber evitado.
Insisto, saber escuchar:
1.- Escucharme
a mí mismo, mi pensar y cuando hablo, saber qué digo, cómo lo digo; escucharme.
2.-
Escuchar al otro a partir de las tres “A” De la atención, de la apertura, de la
acogida.
3°
Escuchar a Dios y escuchar a Dios aquí, no es que
tu escuches voces extrañas en tu conciencia, porque bueno, eso nos implicaría
que estas teniendo alguna enfermedad mental. Escuchar a Dios aquí significa poderlo
interpretar en los signos de los tiempos, poderlo interpretar en las
manifestaciones diarias que nosotros tenemos. Es fundamental saber escuchar, es
fundamental saber escuchar y escucharlo a Él nos llena de sentido. Muchos se
han equivocado porque no han querido escuchar a Dios, porque Dios les ha
hablado a través de personas, a través de situaciones, a través de
experiencias, y no han querido. Ojalá tu y yo hoy sepamos escuchar, ojalá tu
hoy y yo, sepamos entender qué es lo que quiere Dios de nosotros, qué es lo que
Dios nos está invitando a hacer, qué es lo que Dios nos está mostrando.
Fundamental
para ser felices, aprender a escuchar; a escucharme a mí, a escuchar a los
otros con atención, apertura y acogida, y también escucharlo a Él, en la historia,
en las manifestaciones históricas, en las manifestaciones de mi vida.
Pbro.
Alberto Linero Gómez. (Agosto 1°- 2017)
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Para ampliar esta reflexión los invito a ver el vídeo:
Para ampliar esta reflexión los invito a ver el vídeo:
🎵Feliz☀día🎵 El Padre Dios nos ama, nos bendice, camina a
nuestro lado y siempre nos está escuchando. Abramos nuestro corazón para
escuchar su palabra a través de la Palabra, a través de otros y a través de
situaciones y acontecimientos de nuestra cotidianidad; y pidamos nos conceda la
gracia de escuchar a nuestros hermanos con atención, apertura y acogida
siempre.☺
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